Nadie esperaba este giro tan rápido en la decisión del actual Ministro de educación. De hecho y que yo recuerde, desde que asumió su cartera, es la primera vez que rectifica sobre un tijeretazo en toda regla. Tal y como comentábamos en nuestra anterior entrada, el 29 de octubre, se publicó en el BOE la decisión del Ministerio de educación de conceder única y exclusivamente la beca Erasmus a los estudiantes que habían sido perceptores de la llamada beca general durante el año anterior.
Esta decisión, tomada una vez empezado el curso escolar, dejaba sin presupuesto a miles de estudiantes que ya se habían desplazado al extranjero a cursar sus estudios.
¿Decisión voluntaria? ¿Le ha podido la presión de los estudiantes que se organizaron en un tiempo récord? ¿Se cayó de la cama? Nada de eso. Ha tenido que entrar Bruselas en el campo de guerra y dar un AVISO a nuestro gobierno.
En palabras del portavoz del Ejecutivo comunitario Olivier Baily:
La decisión de las autoridades españolas debería haberse anunciado a los estudiantes antes del inicio del año universitario. Los estudiantes que están actualmente en el programa Erasmus para el año 2013-14 se encuentran penalizados y deberían haber sido informados de la suspensión o del cambio de la aportación nacional que le correspondía.
Ayer mismo, el Ministro Wert anunció que los recortes anunciados no afectarían a los estudiantes a los que ya se les había concedido la Beca Erasmus.
La excusa de nuestro Ministro para justificar el recorte del que después se arrepintió fue que la mayoría de los países no hacen aportaciones a los Erasmus, que no hay aportaciones complementarias a cargo del Estado para becas Erasmus, que son Becas concedidas por la Unión Europea.
Y remató diciendo: Además, el año pasado un número de estudiantes de bajos recursos, superior a los 4.000, renuncio a la beca que tenían concedida.
Pues muy bien oiga. Se me ocurre que lo mismo tuvieron que renunciar porque no disponían de los recursos económicos necesarios para estudiar en el extranjero, pese a ser beneficiarios de una beca…
En fin, celebramos la decisión, orden o recomendación dada por Bruselas y damos la enhorabuena a los estudiantes por reivindicar sus derechos.