La negligencia veterinaria que sufren nuestras mascotas no deben quedar impunes, por ello y para qeu eso sea así, os paso a dar una serie de recomendaciones a la hora de poder afrontar una futura reclamación con garantías.
Recordar que las pruebas son la única vía para reclamar la negligenciaa veterinaria y por tanto deberemos recabar las máximas posibles conforme al siguente esquema.
Negligencia Veterinaria: pruebas documentales.
1. Documentos necesarios: Informe veterinario de la clínica que comete la negligencia.
Es de vital importancia que cuando tengamos la sospecha de que se ha cometido un negligencia veterinaria con nuestra mascota, pidamos lo antes posible un informe de las actuaciones veterinaria que hicieron y la mediación que se suministró.
«El informe veterinario de lo que han realizado a nuestra mascota es la pieza fundamental para una posterior reclamación»
Como es normal la clínica emitirá el informe que estime oportuno, pero nunca podrá negarse a su emisión, es una obligación por haber practicado procedimientos veterinarios.
2. Documentos necesarios: Informes de otras clínicas veterinarias.
Es usual que en el tratamiento de cualquier enfermedad de nuestra mascota intervenga más de una clínica veterinaria, al ser usual que haya habido consulta en clínicas abiertas 24 horas, o haber acudido a otra clínica de urgencia.
Para documentar nuestra reclamación por negligencia veterinaria deberemos aportar un informe veterinario por cada centro o especialista que haya intervenido.
«El contraste entre los informes de las distintas clínicas que han intervenido en tratar a nuestra mascota evidencia muchas veces la negligencia veterinaria cometida».
3. Documentos necesarios: facturas o justificantes de pago de los servicios veterinarios recibidos.
Podrá parecer una tontería pero desde un punto de vista legal, solo se puede acreditar la prestación de un servicio veterinario mediante la oportuna factura.
La emisión de la factura es obligatoria y es el documento crucial que permite identificar plenamente la entidad o profesional que ha cometido la negligencia veterinaria.
En caso de no disponer de ella, será necesario al menos disponer de un justificante de pago (recibo, orden de transferencia, cargo en la tarjeta, etc.).
» La factura acredita la relación contractual entre nosotros como propietarios de la mascota y la clínica que ha cometido la negligencia veterinaria».
4. Documentos necesarios: la cartilla de veterinaria.
Aunque creo que no es necesario recordarlo, la única forma de acreditar la propiedad de nuestra mascota de forma fácil y sencilla, es mediante su cartilla veterinaria.
La acreditación de la propiedad sin la cartilla se hace muy difícil y dificulta la reclamación de la negligencia veterinaria.
5. Documentos necesarios: la factura de compra de la mascota.
Para los caso de que nuestra mascota no provenga de procesos de adopción, la factura de compra de la misma nos evidenciará el valor de adquisición, importante a la hora de acreditar los daños ocasionados por la negligencia veterinaria.
Igualmente la factura de compra complementará a la cartilla veterinaria.
Negligencia Veterinaria: pruebas periciales.
1. Pruebas periciales: la necropsia de nuestra mascota.
a. Argumentos a favor.
Sobre la necropsia se ha escrito mucho y es un tema discutible a la hora de reclamar por negligencia veterinaria, ya que en determinadas negligencias veterinarias puede ser una prueba plena.
Ejemplo de que puede ser una prueba crucial lo tenemos en la Sentencia de la Audiencia Provincial de Alicante, de fecha 13/02/15, en la cual la pobre gata Molly fue operada por un clínica veterinaria, la cual al realizar una ovarohisterectomia (esterilización) se olvidaron en su interior una gasa.
La prueba de necropsia con la aportación de la gasa puede ser fundamental para acreditar la negligencia veterinaria.
Desgraciadamente en otros casos que hemos llevado la necropsia no sirve para nada, ya que lo único que evidencia es que la muerte se produjo por el fallo de órganos vitales, pero sin indicar cual el hecho desencadenante de los fallos.
«En ocasiones la necropsia puede ser una prueba imprescindible para demostrar la negligencia veterinaria»
b. Argumentos en contra.
Además del ya expuesto de la falta de acreditación de la causa que desencandena la muerte, otro factor en su contra es el coste.
Existen centros universitarios que cobran entre 400€ y 600€, y luego existen centros privados que llegan a casi dúplica esa cifra.
«El coste de la necropsia además de que en ocasiones no arroja ningún dato al proceso son argumentos en contra de usar dicha prueba en la reclamación de negligencia veterinaria»
2. Pruebas periciales: el informe pericial.
a. La dificultad de conseguirlo.
Creo que no hace falta que explique que el mayor problema de la reclamación de la negligencia veterinaria es conseguir un informe pericial de un veterinario.
Para los veterinarios redactar informes donde expliquen y acrediten la comisión de un negligencia veterinaria por otro compañero, es un «marrón».
En unos caso bajo la excusa de que no lo ve claro, en otras por negarse en base a no dedicarse a ello, la realidad es que conseguir un informe pericial que acredite el daño que le hicieron a nuestra mascota, es casi un milagro.
Es cierto que ante la injusticia de sufrir la pérdida de nuestra mascota por una negligencia veterinaria algunos veterinarios se atreven a redactar el informe, pero en general nuestra experiencia ha sido que eso ocurre en pocos casos.
«Conseguir el informe veterinario de la negligencia es tener muchas posibilidades de que se repare el daño hecho a nuestra mascota».
b. La claridad que debe tener el informe.
Otro de los aspectos a tener en cuenta que además de que nos hagan el informe el mismo debe de pronunciarse de cuales han sido las circunstancias de la negligencia veterinaria.
Un informe que arroje varías posibles causas pero que según el criterio del veterinario que lo redacte no existe una de ellas que prime sobre las demás nos valdrá de poco.
«El informe pericial debe de contener el criterio del veterinario redactor de cual fue a su juicio la causa de la negligencia, no ser un mero relato de posibilidades»
c. Ratificación judicial del informe pericial.
Por último, el informe hará plena prueba si el mismo es ratificado en sede judicial y constesta a las preguntas de las partes respecto a su contenido y la forma de redactarlo.
Es necesario que aparte de redactarlo se defienda su contenido en sede judicial contestando al Juez y a los abogados de las partes.
«La ratificación judicial ante el juez y contestando a las cuestiones de los abogados, permite al Juez valorar la calidad del mismo y su razonabilidad.
Por último recordaros un anterior articulo nuestro que públicamos anteriormente sobre negligencia veterinaria
Como siempre, os animo a luchar contra las negligencias veterinarias, y estoy a vuestra disposición para iniciar reclamaciones o solventar cualquier duda en el teléfono 91.567.28.20, en el correo david_garcia@ariserver.net, o en la web ariserver.net o exoneratudeuda.com.